¿Qué son las habilidades para la vida y por qué importan en la salud mental adolescente?

Las habilidades para la vida son esenciales para que niños y adolescentes (y cualquier persona, en verdad) podamos enfrentar los retos emocionales, sociales y mentales del día a día. En este artículo empezamos una nueva serie en la que iremos descubriendo qué son, por qué son fundamentales para la salud mental adolescente y cómo desarrollarlas desde el aula y en casa. ¿Empezamos este camino juntos?

¿Qué son las habilidades para la vida? Un poco de historia

Las habilidades para la vida son un conjunto de capacidades, actitudes y comportamientos que permiten a las personas afrontar con eficacia, de manera adaptativa y positiva, saludable y constructivamente; las exigencias, retos y el estrés de la vida cotidiana.

A lo largo del s. XX muchas de las teorías que explicaban el desarrollo durante la adolescencia coincidieron en la concepción de esta etapa evolutiva como un periodo turbulento y conflictivo y con mucha frecuencia se confundía el desarrollo saludable con la ausencia de problemas. (Oliva et al. 2010). Esto dio pie a un predominio del modelo de las intervenciones de salud centrado en el déficit y la evitación de riesgos.

Este concepto, el de las habilidades para la vida, fue impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a principios de los años 90, como parte de una estrategia global de promoción de la salud. Como iniciativa global se orientaba a colegios y escuelas y surgió del reconocimiento de que, debido a los cambios culturales, tecnológicos y los diversos estilos de vida, con frecuencia los jóvenes de hoy no están suficientemente capacitados con las destrezas necesarias para enfrentar los retos y presiones del mundo contemporáneo. Se espera que adquirir, practicar e integrar habilidades para la vida desde la infancia potencia la existencia desde la comprensión propia, y promueve el respeto y la cooperación.

Posteriormente, otras entidades como UNESCO, UNICEF y distintos organismos educativos lo han adoptado y adaptado a contextos escolares y comunitarios. La infancia y la adolescencia son los periodos de desarrollo durante los cuales se adquieren estas habilidades a través de diversos métodos y personas [WHO Program en salud mental, 2003]. Están directamente relacionadas con las acciones personales, las que hacemos por los demás y las que hacemos para cambiar el contexto que nos rodea para que sea más saludable.

Importancia de las habilidades para la vida en la salud mental adolescente

El término nació en un contexto de creciente preocupación por el aumento de conductas de riesgo entre niños y adolescentes:

• consumo de sustancias,
• violencia y acoso,
• abandono escolar,
• problemas de salud mental.

La OMS propuso el enfoque de enseñar habilidades potenciadoras desde la infancia, no solo para prevenir, sino para promover el desarrollo integral y el bienestar mental y emocional. Y, como indica:

El desarrollo de las habilidades para la vida puede marcar una diferencia significativa en la vida de cualquier persona, especialmente durante la adolescencia

OMS

Hoy, más de tres décadas después no solo seguimos con esas conductas de riesgo, sino que van en aumento. Vivimos en una sociedad donde los adolescentes están en riesgo de salud mental: el estrés, la sobre exposición digital, la presión por el rendimiento y la incertidumbre son parte del día a día. Especialmente para las nuevas generaciones.

Breve historia y evolución

Empecemos revisando la propuesta original de las habilidades para la vida. Nos remontamos a 1986 cuando las habilidades para la vida como concepto clave en la promoción de la salud aparecen a la Carta de Ottawa (WHO, 1986) en la forma genérica de habilidades (skills). Posteriormente la diversa literatura ha ido alternando con diferentes conceptos:

• Habilitadas para vivir (WHO, 1993)
• Habilidades para la vida / life skills (OPS, 2001; WHO, 1994, 2015)
• Personal skills (UNAIDS, 1994; WHO, 1997, 1999b)
• Aptitudes para la vida (WHO, 2018)
• Socio-emotional skills (OECD,2018; WorldBank,2023)
• Transversal skills (European Comission, 2020b) 
• Skills for Health (WHO, 2021) ajustando en los diversos casos el número y la inclusión de unas u otras habilidades

El año 1993-94, la unidad de salud mental de la OMS de Ginebra (WHO, 1993, 1994) realiza la primera concreción y definición de 10 habilidades y realiza una propuesta operativa. Esta propuesta procedía de estudios previos que sostenían que la incorporación de habilidades psicosociales podía prevenir el consumo de sustancias aditivas (Botvin et al., 1980, 1984; Pentz, 1983) o los embarazos en adolescentes (Schinke, 1984; Zabin et al., 1986), entre otros de otros factores positivos para la salud.

¿Cuáles son las 10 habilidades para la vida propuestas por la OMS?

Finalmente, en 1997 la Organización Mundial de la Salud definió un primer conjunto de diez habilidades psicosociales básicas que, desarrolladas desde la infancia y adolescencia, permiten a las personas afrontar los retos del día a día de forma saludable, ética y efectiva.

Éstas son:

1. Autoconocimiento
2. Empatía
3. Comunicación asertiva
4. Relaciones interpersonales
5. Toma de decisiones
6. Solución de problemas y conflictos
7. Pensamiento creativo
8. Pensamiento crítico
9. Manejo de emociones y sentimientos
10. Manejo de tensiones y estrés

El año 2003, la OMS redefine y combina las 10 habilidades clave, y hace un cambio sustancial eliminando el pensamiento creativo, e incorporando la negociación y el rechazo. También la Organización Panamericana de la Salud – OPS – (OPS, 2001) revisa las 10 definidas anteriormente y eleva a 16 las habilidades para la vida, incluyendo el pensamiento creativo, y algunas como motivación como sentido de propósito, autocontrol, resiliencia.

A pesar del importante número de programas y estrategias para trabajar y desarrollar estas habilidades, diferentes agencias internacionales ponen de relieve la falta de claridad conceptual y de instrumentos de medida.

Hacemos una llamada de atención en este punto, porque conocer y practicar las habilidades para la vida, no es meramente cuestión de adquirir conocimientos teóricos, lo relevante y necesario es integrarlas en nuestro día a día.

Las 5 habilidades que añadimos desde WHI-Institute

Han pasado más de 20 años desde el planteamiento original de las habilidades para la vida por parte de la OMS, aun así todas ellas siguen siendo igual de vigentes y necesarias. No obstante, desde nuestra experiencia y perspectiva salutogénica, para mejorar y llevar a su máxima potencia la salud mental de la infancia y adolescencia;  la promoción del bienestar mental necesita enriquecerse con cinco habilidades clave que hoy son igualmente fundamentales de añadir a la lista y trabajarlas. Porque lo que importa que sean parte de uno mismo y por encima de todo, saber reconocer cuando se necesitan poner en curso ante las circunstancias y desafíos de comprensión que se nos plantean cada día.

Por eso, el enfoque de investigación salutogénico pedagógico que seguimos en WHI-Institute, las combina con los determinantes clave de salud, especialmente de los 4 pilares que son clave para la salud mental.

De este modo, obtenemos un conjunto de 15 habilidades clave para el bienestar mental, con la incorporación de:

• Resiliencia
• Aceptación
• Confianza (motivación y sentido)
• Inspiración y compromiso social (lo que en inglés se conoce como Advocate)
• Cooperación y trabajo en equipo

Estas cinco competencias amplían el modelo original y lo alinean con los retos actuales que enfrentan niños y adolescentes, tanto a nivel individual como colectivo. Obtenemos resultados y un impacto positivo para nuestra salud y bienestar mental, con esta formación cuando, a través de herramientas prácticas, facilitamos el aprendizaje sobre cuando y cómo usarlas y sobre todo, vivirlas, en nuestra relación con las situaciones personales y sociales que nos encontramos a lo largo de la vida.