Observa tus cambios a lo largo de la vida profesional, ¿qué te mueve?
¿Puedes bucear más profundo? Ya conocemos qué aparece en la superficie, se ve rápido: mejor posición, mejora económica, más equipo, más ‘accountability’…
Si, pero en verdad, ¿qué guiaba tus pasos?. Cuando uno mueve ficha y cambia de trabajo, ¿podría ser que ese emprender un camino nuevo esté movido por un anhelo de encontrar bienestar, paz, felicidad y equilibrio?
Si buceo un poco más, ¿puedo darme cuenta cómo busco unirme y comprometerme con causas y misiones significativas, con sentido y que mejoren en algún aspecto el mundo?
Sigo nadando y buceando en este trozo del río de la vida en que he caído… ¿Puedo ver cómo busco compartir? ¿Me doy cuenta que mi acción es crear?
Vale, hasta aquí lo ves… Y ahora una bocanada más. ¿Puedes ver qué quieres hacerlo en entornos donde se pueda cooperar abiertamente, y relacionarte con otros para aprender y poder expandir al máximo todos los talentos?
Emprender. Bienestar. Compromiso. Cooperar… Quizá es que el curso de la vida no puede separarse en trocitos: ahora emprendo, ahora me doy un poco de bienestar, ahora coopero, y ahora me comprometo… Todo va conmigo. Quizá es que todo está unido, y ¿todo pasa por hasta dónde buceo?
Quizá me equivoqué cuando intenté dividir, categorizar e identificarme con alguno de esos pedazos, o de cualquier otro pedazo. En verdad, cuanto más buceo, mejor comprendo cómo todo es uno, y así por fin veo: igual que el surfista se hace uno con la ola y baila con ella, aunque si miro bien veo que en verdad solo se deja-ser, se deja mecer, en pura armonía con el curso de la vida.
Relato dedicado a Javi, un gran ‘Millenial’