Solemos pensar que la verdadera epidemia en los entornos laborales es el estrés, pero para sorpresa de muchos hay un problema silencioso mayor: es la soledad en el trabajo. De hecho, recientes estudios muestran como reducir el sentimiento de soledad o aislamiento en el lugar de trabajo, es bueno para el negocio además de beneficiar la propia salud.
Dichos estudios aparecen en este interesante artículo de la prestigiosa Harvard Business Review. Aquí se destaca cómo la soledad en el trabajo se está convirtiendo en una epidemia creciente de salud, y tan amenazante es para la vida como la que provoca fumar 15 cigarrillos al día o la obesidad. También dicha soledad se asocia a mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, diabetes, depresión, ansiedad y demencia precoz.
Para explicar con números lo anterior, una investigación entre la población americana destaca que más del 40% de las personas que trabajan en empresas con muchos empleados, declaran sentirse solos; y del mismo modo, el 50% de los CEO y directivos, también dicen sentirse solos en su rol.
Esta soledad en el trabajo perjudica el razonamiento y la toma de decisiones, reduce el rendimiento y limita la creatividad. Pero, ¿qué podemos hacer si nos encontramos en este camino de aislamiento? Investigaciones de Gallup muestran que tener fuertes conexiones en el trabajo aumenta el compromiso de los empleados, se produce un trabajo de mayor calidad y se reducen los costes por absentismo.
Comprender los enormes costes de la soledad para el ser humano y su impacto económico y social, hará que nos pongamos en marcha, especialmente allí donde las personas pasan la mayor parte de su tiempo, en las empresas, en las escuelas, y con la familia.
¿Por qué está creciendo tanto el sentimiento de soledad en el trabajo?
Ésta no es una simple cuestión emocional, es pura biología. Desde hace mucho tiempo, nuestra capacidad de construir relaciones de confianza y de cooperar han sido la clave para nuestro desarrollo. Y a lo largo de miles de años de evolución, el valor de la conexión social se ha convertido en parte de nuestro sistema nervioso, de tal modo que la ausencia de esta fuerza protectora crea un estado de estrés que se refleja en nuestro cuerpo y afecta nuestra salud mental.
¿Por qué está creciendo tanto el sentimiento de soledad? Hoy día, por primera vez hay más población que vive sola. Aumenta la movilidad por trabajo y por tanto, es más probable vivir lejos de la familia y los amigos. Por otro lado, los modelos de trabajo se están flexibilizando, los negocios se están digitalizando y, además, se reducen las interacciones personales y cambia esencialmente el modo en que las personas se relacionan entre sí.
Vemos como en muchos entornos laborales se abren espacios de descanso y de encuentro, donde la gente puede relacionarse informalmente. También hay una amplia oferta de espacios de yoga, mindfulness, consejos saludables y herramientas anti-estrés. Pero aún son pocas las que se ocupan de cómo son las conexiones internas, no hablamos de cómo es la comunicación, sino la conexión humana. Algunos llaman a estas pocas «organizaciones humanas«
Lograr una conexión auténtica requiere crear un clima de confianza e interés genuino por el otro, un ambiente que abraza la identidad única de las personas. Pasamos mucho tiempo con los compañeros de trabajo, pero ¿sabemos de verdad lo qué les importa? ¿Cuáles son sus valores? ¿Compartimos nuestras motivaciones y dolores de cabeza con ellos?
¿Qué hacer? ¿Por dónde empezar este camino? En nuestro blog iremos ofreciendo una serie de elementos clave, los pasos que precisas conocer para que renueves tus relaciones y se vuelvan saludables y productivas. Y si quieres hoy mismo empezar el cambio, solicita más información sobre nuestra oferta formativa a través de nuestro formulario de contacto.